Queridas, me despido por unos días. Pensé que podría seguir escribiendo en las noches hasta el día que salieramos de viaje, pero ha resultado imposible con tantos pendientes que surgen entre tanto preparativo. Ya teniendo la costumbre de compartirles algo cada día se me hace difícil no hacerlo, pero más difícil aún se me hace no poder leerlas!
Por tres viernes estará en receso el Diario de la Mujer Sencilla. Las voy a extrañar.
Seguiré el ejemplo de Xia y cuando tenga acceso a computadora les compartiré fotos de nuestra visita con la familia y los abuelos.
Les deseo tres semanas de primavera preciosas, una Semana Santa maravillosa y muchas deliciosas pláticas blogueras.
¡Besos a todas!
Silvia